El Ancestral Papel Coreano Artesanal: Hanji


Cuando el arte de la fabricación de papel se introdujo a Corea, ésta tomó la técnica, la reversionó, y creó un nuevo tipo de papel resistente y sólido conocido como Hanji (한지).

Según el dicho coreano “el papel dura mil años y la seda dura cinco siglos“, lo cual convierte al Hanji en un valioso activo cultural que refleja la tenacidad implícita del pueblo coreano.

 

La cultura tradicional coreana se puede dividir en 6 categorías: Hanbok (vestimenta), Hanok (vivienda), Hangeul (escritura), Hansik (gastronomía), Hanguk eumak (música) y el Hanji (papel). Cada una de estas categorías, que comienzan con la palabra Han (“de Corea”) fueron oficialmente designados “Han Style” en 2006, por el ex Ministro de Cultura de Corea del Sur, Kim Myung Gon.

“No busco promocionar las 6 categorías del Han Style simplemente por ser nuestras. Ellas son tan destacadas como cualquier otra cultura, pero han sido subestimadas y mantenido escondidas, desde que la gente comenzó a emular la cultura occidental”. (Entrevista del año 2007).

El origen del Hanji

¿Pero qué hace al Hanji tan especial? Hanji significa literalmente “el papel de Corea”. El principal material utilizado para hacer Hanji, es la madera de la Broussonetia papyrifera (falsa morera, morera de papel o mora turca), un arbusto caducifolio, muy parecido a la morera común, de la que es pariente cercano.

Al igual que cualquier planta, el crecimiento de la morera se ve afectada en gran medida por su entorno. El suelo y el clima afectan a las características del arbusto, como su ancho y longitud, que a su vez determinan la calidad del papel.

El secreto de la resistencia del Hanji es la corteza de esta morera, que es fuerte y puede resistir sin descomponerse y sumergida en agua durante bastante tiempo ¡Algunos ejemplares han resistido, mantenidos así, 1 año entero!

El papel de más alta calidad, se produce con arbustos de tan sólo un año de edad. Mientras que el papel más barato, utiliza la pulpa de ejemplares de entre 20 y 30 años de edad.

Broussonetia papyrifera

Como adelantamos, esta morera es un árbol de hoja caduca, que puede alcanzar entre 9 y 12 metros de altura y es de copa amplia, suelta y de sombra semidensa, por lo cual no habría que desecharlo como posible árbol de calle para nuestras ciudades, ya que resiste bien la polución, los fríos de hasta 10ºC bajo cero y parece que hasta cierto punto resiste incluso la aridez y los suelos arenosos o pedregosos.

Prospera muy bien a pleno sol pero sus raíces, gruesas y carnosas, son muy sensibles a la asfixia, lo que es un detalle a tener en cuenta en el caso de construir aceras luego de plantados. Como ramifica desde baja altura requiere poda y, al igual que las moras, sus frutos caen al suelo (pero éstos no son comestibles!!!). Si te interesa adquirir una de estas plantas para sumar a tu “jardìn coreano”, te cuento que en Argentina, el único ejemplar del que se tiene constancia se encuentra en la provincia de Río Negro (pero puedes conseguir más fácilmente una Mugunghwa).

Fruto de la Broussonetia papyrifera

Los usos del Hanji

Antiguamente, más allá de utilizarlo sólo para cuadernos y libros, también servía para revestir puertas y ventanas y protegerse contra el viento manteniendo el calor de una habitación

Puedes ver también nuestra nota sobre LAS ALDEAS TRADICIONALES Y EL ESTILO HANOK

Al usarlo en las puertas y las ventanas, deja pasar tenuemente el sol, ofreciendo un ambiente elegante mientras regula la temperatura y la humedad. Al tacto, el Hanji es suave y con una textura lustrosa. Suele utilizarse en muchas formas de arte tradicionales de Corea, como la caligrafía y la pintura.

Se tiñe y se utiliza para hacer lámparas de colores, abanicos, cajas, e incluso máscaras ceremoniales. Se aplica también en la decoración de todo tipo de muebles. Algunos textos antiguos de más de mil años fueron preservados del deterioro gracias a que fueron escritos en Hanji.

Como era tan fuerte, hasta llegaron a fabricarse armaduras con este papel. Las armaduras fabricadas con varias capas de Hanji, protegían contra los flechazos.

Esto vuelve al Hanji muy versátil, ya que puede hilarse como el algodón y tejerse como tela para hacer ropa, que se ve un tanto rústica ¡Pero resulta muy cómoda! Incluso está actualmente en marcha un estudio, de Corea del Sur y los EEUU en conjunto, sobre las posibles propiedades protectoras del Hanji en transbordadores espaciales.

Fabricación del papel Hanji

 

El proceso de fabricación del papel coreano es complicado, lento y laborioso. La corteza seca de la morera se corta una vez pasada la temporada de heladas y se cocina al vapor. Luego se sumergen en agua durante un día, se las deja secar al sol y se separa la corteza de la fina capa de madera que la acompaña, que es la necesaria para el proceso.

La madera entonces se cocina al vapor dentro de una olla de hierro y se sumerge en soda cáustica para blanquearla. Este es el paso limitante en la producción del Hanji, ya que la baja alcalinidad de la soda cáustica protege las fibras de celulosa, a diferencia del blanqueamiento ácido utilizado en la producción del papel común.

La madera así preparada (previamente escurrida y exprimida) se muele con la ayuda de un mortero de piedra, luego se enjuaga con agua y se coloca dentro de un contenedor. El resultado de la molienda se enjuaga nuevamente y se mezcla con agua y un adhesivo natural. Más tarde se cuelan las fibras con una pantalla de bambú, que es estratégicamente sacudida hacia atrás y hacia adelante para crear un patrón entrecruzado de fibras.

Una vez escurrido todo el agua, la pulpa se seca dejándola apilada al sol sobre un panel de madera, finalizando así el proceso. Para más información sobre la fabricación artesanal del papel coreano, pueden visitar la página web del Museo del papel de Corea en Jeonju (eso sí, está en coreano pero las imágenes son deslumbrantes).

 

 

 

 

 

En los tiempos modernos está siendo famosa la artesanía de fabricar muñecos con papel Hanji. Los muñecos representan vivamente la cotidianidad de los coreanos.

 

Las pequeñas cantidades, el largo proceso de producción y la limitada distribución a los mercados especializados hacen que sea difícil para el papel coreano tradicional competir en el mercado de papel moderno, de más fácil producción y más barata. Por lo tanto, el gobierno de Corea ha designado a los maestros de la fabricación de papel coreano como bienes culturales intangibles y protege a la industria con especial cuidado.

 

Daremos fin a este informe con las sabias palabras del ex Ministro de Cultura Kim.

“El Hallyu no puede simplemente sobrevivir por sí solo. Para que el Hallyu se mantenga firme, es necesario contar con una sólida base de apoyo fundamental, para que pueda ser impulsado a la par de los otros elementos culturales“. (2007).

¿Conocías el Hanji? ¿Te gustaría armar un jardín con puras plantitas autóctonas coreanas? ¿Sobre qué otros elementos del Han Style te gustaría que te contemos?

Créditos: Wikipedia, Teodorico Hildebrandt, Ricky Rhodes, Emma Hall, Visit Korea, WollPoly@Xiahpop