[Cine Japonés] Shoplifters: la familia que se decide amar


El domingo pasado terminó la Semana de Cine del Festival de Cannes 2018 en nuestro país donde pudimos ver varias películas, entre ellas Shoplifters, la última película de Hirokazu Kore-eda.

Este director no es un extraño para los espectadores argentinos, dos de sus películas fueron premiadas en festivales realizados en nuestro país. En 1999, durante la 1ª edición del BAFICI, su cinta After Life, recibió el premio a Mejor Guión y a Mejor Film; y en el 2008, Still Walking obtuvo el premio a Mejor Película en el Festival de Cine de Mar del Plata.

La película que está presentando ahora ya recibió varios galardones, incluyendo la Palma de Oro en el Festival de Cannes por unanimidad, además se habla de que es muy posible que sea una de las nominadas a Mejor Película Extranjera en la próxima entrega de los premios Oscar.

La cinta nos muestra la historia de una familia de clase baja que vive en una humilde casa y la cual se dedica a robar alimentos y productos varios de distintos supermercados. Una noche encuentran a una niña en la entrada de su departamento y deciden llevarla a casa. Al comienzo tratan de llevarla de vuelta, pero al darse cuenta de que la pequeña sufría de abusos en su casa, deciden integrarla como un miembro más de la familia.

En Manbiki Kazoku podemos ver los lazos familiares, el amor entre la familia de elección y lo fuerte que puede llegar a ser ese vínculo, incluso más que el impuesto. La película no busca conmover con el golpe bajo o las lágrimas fáciles, lo hace desde una historia con personajes complejos y humanos que buscan amor y amar sin caer en cursilerías como muchas veces pasa en este tipo de películas.

El cine japonés es muy bueno contando este tipo de historias y el film tiene un elemento esencial que la hace funcionar a la perfección, su elenco. Todos los actores están perfectos en sus papeles, ninguno desentona y realmente logran transmitir lo plasmado en el guión, con frases, miradas, gestos, ya desde que uno los ve apilados en esa pequeña casa puede darse cuenta del sentimiento de felicidad por estar juntos. Una mención especial es para los niños, Kairi Jō y Miyu Sasaki que llegan a emitir una inocencia y tristeza que conmueven al espectador.

El film es simple, directo y efectivo, pero no por eso pierde humanidad ni corazón, reflejando una oda a la familia que se elije amar.

La película está dentro de la preselección para competir por el premio Oscar a Mejor Película Extranjera, esperemos que pueda obtener un puesto en la terna, porque realmente se lo merece.

Les dejamos el link del trailer de esta más que recomendada película:

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