Miedos japoneses. Las leyendas se convierten en pesadillas.


El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son.

Tito Livio (59 AC-64 AC) Historiador romano.

Las leyendas siempre han formado de la historia, del folklore de una región. Bien sabemos que la tierra japonesa, como la tierra asiática en general, es un lugar muy temperamental en relación a sus leyendas; especialmente si los extranjeros entran en ella, no respetando las pautas sociales que priman sobre ella. He encontrado un “Illustrated book of Japanese monsters” realizado por Gojin Ishijara, con el cual nos llevaremos menudas sorpresas.

Los miedos

Los miedos son emociones de tipos primarias, muy intensas, generalmente emergen en presencia de un peligro, real o imaginario. El punto máximo de miedo es el terror, el cual se caracteriza por una imposibilidad del “pensar conciente”. El terror es lo que conocemos como el estado de fobia.

El libro de Gojin Ishijara nos muestra la forma de estas entidades que han aterrado a los japoneses desde tiempos ancestrales, y además de ello, nos mostrarán cómo se han mantenido vigentes en la actualidad, incluso llegando a nuestro amado universo anime. Seleccioné algunos.

Kappa:

Los Kappa (河童) inflexión de “niño de río”, son humanoides que habitan los ríos, las lagunas y lagos japoneses. El origen del mismo radica en dos hechos, por un lado, asociado a una salamandra nativa muy agresiva que vive en el país insular (Andrias japonicus), como también a la vieja tradición japonesa de introducir en pequeños barcos a los fetos que habían nacido muertos. Los Kappa tienen aspecto de niños, con cabeza de tortuga, poseen la cima de su cabeza calva y llena de agua y tienen piel reptiliana, escamosa y huelen a pescado podrido. Durante el invierno y el otoño, se mudarían en secreto hacia las montañas.

Los “Kappa” considerados malos en las tradiciones japonesas: asesina, violan y maldicen.

Los Kappa son groseros, olorosos y malignos, mataban a las personas que caían en el agua y atacaban de noche. Espiaban mujeres desnudas y después las violaban. Los niños humanos son un manjar para ellos, pero cuando no comían de ellos, se alimentaban del shirikodama” o bola de carne en el interior del ano, posiblemente la próstata. Se los aleja con fuego. Cuenta la leyenda que a su vez si uno le realiza una reverencia a un Kappa, éste responde con una reverencia también, cayéndose el agua sobre su calva y perdiendo temporalmente sus poderes.

En 1801 se registró, al este de Tokio, la captura de este Kappa.

Sólo un alimento era más delicioso que los niños: los pepinos. Los Kappa son curiosos y aman espiar a los humanos. Hablan y entienden japonés. Las familias japonesas arrojaban pepinos a los lagos por el miedo a que ellos intentarán robar y matar a sus hijos.

 

¿Alguna vez fueron a un río o lago en la oscuridad absoluta de la noche y se sintieron espiados?

Jorōgumo:

Jorogumo, la araña con más de 400 años que se podía convertir en mujer.

Jorōgumo (絡新婦) puede leerse literalmente de dos formas o como “novia” o “araña puta”. La Jorōgumo es una araña que tras cumplir más de 400 años, recibía poderes mágicos. La araña se transformaba en una hermosa y seductora mujer vestida de novia que tocaba una biwa (los fanáticos de Naruto recordarán aquel episodio en el que Jiraiya, Naruto y Sakura avanzan hacia la cueva de Orochimaru y Ero-sennin se encuentra con una Jorōgumo que le tocaba bonitas canciones y le daba de beber), los acercaba y en el momento indicado, los asesinaba para comérselos.

Una Jorōgumo con un apetito enorme por la carne de los hombres.

Las Jorōgumo siempre inspiraron mucho terror, incluso, los leñadores y campesinos evitaban acercarse a una cascada Joren, en Izu, Shizuoka, ya que la leyenda contaba que una Jorōgumo habitaba allí y había asesinado a un hombre del lugar. Muchas Jorōgumo han aparecido en diferentes anime, juegos y películas, como ser Juri Han de “Super Street Fighter IV”, Cydaea en “Diablo 3”, Arukenimon en “Digimon 2” y en “xxxholic” el ojo derecho de Watanuki es robado por una de estas criaturas.

Rokurokubi:

Los Rokurokubi son seres que de día poseen la cuello normalmente pero de noche, esto se modifica, pues se estiran. Pueden existir Rokurokubi concientes de su condición o no.

Los Rokurokubi (ろくろ首, 轆轤首) son criaturas mágicas que pueden estirar sus cuellos de noche para espiar a las personas o asustarlos. Estas criaturas pueden vivir con los mortales sin mayores conflictos y además pueden casarse con ellos pero sin revelar su verdadera identidad. Los Rokurokubi pueden no saber que lo son, pero experimentar durante la noche que recuerdan ver diferentes ángulos de la habitación al despertar. Por lo general estos seres son mujeres, y existen de dos formas, o aquellas que pueden estirar su cuello, o aquellas que pueden incluso desprender su cabeza del cuerpo y pasearla libremente.

Un “Rokurokubi” ilustrado por Katsushika Hokusai. Cuenta los pormenores de estas criaturas fascinantes y aterradoras.

Algunas de estas Rokurokubi son señaladas como sangrientas, deseando beber la sangre de los mortales y comer su carne mientras duermen o están distraídos. En un “Kasshi Yawa” (甲子夜話) se cuenta que una joven sirvienta era sospechada de ser una Rokurokubi, entonces el maestro de las sirvientas entró en la noche en su habitación. Al ingresar notó como un cuello largo y recto se paró sobre él, y del terror se quedó paralizado. La joven sirviente al notar esto volvió su cuello a la normalidad.

Data un comunicado de 1810 en Tokio que nos cuenta que se logró capturar a un Rokurokubi y se lo depositó en un Show de Freaks. Raizen de “Yu Yu Hakusho”, Orochimaru de la saga de “Naruto”, Chuda Chiaki de “Legends of the five rings” y Miki Hosokawa de “Hell teache Nube” son Rokurokubi.

Baku:

Los Baku (獏) son quimeras que aparecen en la noche y que devoran tanto sueños como pesadillas.

Estas mágicas y peligrosas criaturas están hechas de tapir, elefantes, vacas, cuerpo de león y patas de tigre. Los Baku son originarios de mitos chinos, no japoneses, pero éstos últimos lo captaron como tal desde los siglos XIV y XV. Los chinos se defendieron de ellos con amuletos. En el siglo XVII se escribió por primera vez en Japón sobre los Baku, considerándoselos como quimeras tímidas pero muy robustas y voraces.

Baku, las quimeras devoradoras de sueños. Nada puede escapar de ellos.

Muchas otras formas hemos encontrado en el anime de estas quimeras, como por ejemplo, Drowzee, Munna y Musharna en “Pokemon” serían variables de Baku y como Tapirmon o Bakumon en “Digimon”.

Tengu:

Un Tengu (天狗) literalmente “perro celestial” fue considerado desde la antigüedad como un demonio que habitaba en el interior de los bosques. Los Tengu estaban enemistados con los budistas, ya que estos últimos los consideraban demonios que traían desgracias, guerras y conflictos.

Los Tengu poseían características físicas de aves y de extranjeros, es decir, narices grandes, coloradas. Sus ojos eran negros como los de las aves y disfrutaban de manipular a las personas para destruir a los monjes y monjas budistas.

Los Tengu batallaron con los monjes y los raptaban para asesinarlos en el interior de los bosques, atándolos en lo alto de los árboles y haciéndolos alucinar; manipulaban la mente de mujeres hermosas para confundir sus caminos espirituales e incluso se convertían en monjes o monjas para raptar a sus “compañeros”. Los Tengu podían crear ilusiones poderosas, incluso se dice que ellos hacían comer a los monjes excrementos de animales, haciéndoselos pasar como alimento corriente.

Un monje luchando por su vida contra un Tengu por Kawanabe Kyōsai.

Con el correr de los años, los Tengu fueron considerados además de demonios, fantasmas de personas vanidosas, muy orgullosas o engreídas. Los Tengu están en los escritos más antiguos japoneses, ya que se les adjudica haber poseído a una vieja Emperatriz del Sol Naciente. También, se dice que durante el período Heian, hicieron perder la vista a varias personas en la Corte Imperial, incluso se dice que el Tengu de un monje resentido volvió y destruyó la vista de un Emperador. Al final, los Tengu resultaron ser las almas de personas vanidosas que tras muertas, se hundieron en la ira y el resentimiento.

Un hombre siendo herido al lograr escapar de un Tengu. Durante mucho tiempo, las leyendas contaban lo peligrosos que eran estos demonios.

Yurei:

Los Yurei (幽霊) o tradicionales fantasmas japoneses, son aquellos que vuelven desde la muerte con algún fin en especial, muy diversos todos, pero por su características visuales generaron pavor en los asiáticos durante muchos tiempo. Los Yurei visten de blanco, no posee calzado, tienen el cabello muy negro y los ojos inyectados de sangre, su piel es pálida como la luna y un aura de pesar y estridente silencio los cubre. Muchos de estos fantasmas poseen como común denominador: muerte dolorosa o suicidio.

Yurei o los tradicionales fantasmas japoneses sin descanso, que aparecen entre las 2 AM hasta el amanecer, buscando aterrar a los vivos.

Los Yurei a su vez se sub-dividen en:

  • Onryo: Son los fantasmas vengativos que buscan el dolor de la persona por la que vuelven o molestan. Son los asesinos, los aterradores y cazadores.
  • Ubume: Son los fantasmas de las madres que han muertos durante el parto y vuelven desde el otro mundo para proteger a sus hijos en el presente. Los niños más pequeños las ven y pueden hablar con ellas. Los japoneses dicen que ellas traen dulces.
  • Goryo: Son los fantasmas de la clase aristocrática, aquellos que por ser martirizados o asesinados por el bien general, vuelven a vengarse trayendo desgracias y calamidades de todo tipo.
  • Funayurei: Son los fantasmas de los que han muerto en el mar. Como todos sabemos, Japón al ser un país insular a perdido muchas vidas en las profundidades de los mares.
  • Zashiki-Warashi: Son los fantasmas de los niños muertos. Mucho menos malignos, sino más bien traviesos, estos Yurei pueden avisarle a una persona sobre futuros peligros, si con la primera se siente a gusto.
Los Yurei vuelven y atacan cuando uno menos se lo espera. No hay forma de librarse de ellos. Aquí, en una escena de la película “The Grudge”.

Muchos sitios o formas existen en Japón que están encantados por los Yurei:

  • El Castillo de Himeji: Encantado por un fantasma muy conocido llamado “Okiku”.
  • Aokigahara: También conocido como Bosque de la Muerte. A los pies del Monte Fuji, es el lugar predilecto de los japoneses para suicidarse.
  • El papel de Oiwa en la obra “Yotsuya Kaidan”: La actriz que interprete este papel deberá pedir en la tumba de Oiwa, permiso para hacerlo.
Japón, una tierra plagada de Yurei.

Existe un Templo, el de Zenshoan que posee la mayor cantidad de pinturas sobre Yurei en todo Japón, pero solamente abre en Agosto, el mes para las historias de fantasmas japonesas.

Nure-Onna:

Las Nure-Onna (濡 女) literalmente “mujer húmeda”, es un ser monstruoso que posee una cola de más de 300 metros y que se alimenta claramente de hombres. Las Nure-Onna son familiares de las Rokurokubi por la facilidad para estirar sus cuellos y cuerpo. Las Nure-Onna poseen un cabello hermoso y tienen la fuerza como para derribar un bosque entero. Se esconden en los bosques en donde cazan a sus presas y lavan sus largos cabellos en el río.

“Sara-Hebi” es una criatura con cabeza de mujer, pero cuerpo de serpiente. Esta obra data del período Edo y su autor es desconocido.

Cuenta la leyenda que una Nure-Onna utiliza un bebé falso envuelto en una sabanita para cazar a sus presas, en el caso de que la persona salga corriendo con el niño para rescatarlo, éste pesará tanto que no podrá moverse (una escena muy parecida a la de Ikki de Fénix cuando en su primera pelea contra Shaka de Virgo, éste último le crea la ilusión de que su hermano Shun de bebé, pesa muchísimo) y de esa manera lo devora.

En muchas de las historias, Nure-Onna es una bebedora de sangre humana, a través de su lengua extremadamente larga y peligrosa. Esta criatura ha sido arrojada a vivir en las afueras de las grandes ciudades, entre bosques y ríos.

Ikki de Fénix protege a Shun, pese a que sea una ilusión de Shaka de Virgo. En esta técnica, Shaka utiliza el mismo modus operandi que una Nure-onna.
Orochimaru es por excelencia un Nure-Onna y Rokurokubi al mismo tiempo.

 Kyubi no Kitsune:

El Kyubi no Kitsune, conocido literalmente como “Zorro de Nueve Colas” es un ser sumamente poderoso en la tradición japonesa. Este zorro posee tantas leyendas como colas, muchas de ellas lo asocian con el Dios Inari, otros con que son embaucadores y otras en las que son seres mágicos que traen rocas preciosas. También se le reconoce como poder, el de transformarse en mujer bonita y seducir a hombres, también para realizar travesuras, pero cuando el zorro se transformaba en mujer podía ser mujer o amante de hombres.

El legendario “Zorro de Nueve Colas”, ser mágico y sumamente inteligente.

En Corea también se conocía a esta criatura, pero con el nombre de Kumiho (구미호/구) y se decía que podía vivir los mil años, pero que éste devoraba carne humana y que vagaba por los cementerios de noche devorando la carne de los muerto. En China éste era llamado Huli Jing (狐狸精) y poseía las mismas características japonesas, de cierta ambigüedad moral. Los chinos los consideraban como “espíritus zorro” y les temían.

El Príncipe Hanzoku, aterrorizado por un zorro de nueve colas. Impresión de Utagawa Kuniyoshi (siglo XIX).

Los Kitsune en Japón poseían mucho inteligencia y podían transformarse además en ancianos que vagaban por las tierras. Pueden volar y tienen el don de la clarividencia como el de la invisibilidad. Todos recordarán la hermosa película “Princesa Mononoke” en donde los zorros representaban un clan animal con poderes especiales y sumamente feroces.

El “kitsunetsuki” es considerada una psicosis regional propiamente japonesa tras la llegada de la psiquiatría en el s. XX al país insular.

El kitsunetsuki (狐憑き o 狐付き?) literalmente significa “el estado de estar poseído por un zorro”, representaba la posesión por un zorro, el cual ingresaba por las uñas de mujeres jóvenes y les absorbía la energía vital. Si una familia poseía un familiar poseído por un zorro, esta familia debería vivir en el ostracismo más extremo. A su vez, el zorro le daba ciertos poderes a estas jovencitas, por ejemplo, les hacía hablar en idiomas que ellas no conocían, o si eran analfabetas, las hacía leer. Cuando el exorcismo se realizaba y el zorro era echado del cuerpo de la posesa, la joven no podía volver a alimentarse nunca más con la comida que le agrade al zorro. Por otra parte, la posesión del zorro implica que el rostro de la joven cambie y se asemeje al de un zorro.

En la medicina, el kitsunetsuki es una psicosis étnica única en la cultura japonesa. Aquellos que sufren la condición creen que son poseídos por un zorro. Los síntomas incluyen ansias por el arroz o frijoles rojos dulces, apatía, inquietud y aversión al contacto de ojos. El kitsunetsuki es similar pero distinto de la licantropía clínica, lo que se conocería como síndrome en donde la persona afectada alucina que es un animal.

Tenjo-Sagari:

Los habitantes de los techos, fantasmas que habitan como si nuestros techos fueran sus suelos.

Los Tenjo-Sagari son fantasmas que han podido romper la barrera entre este mundo y el otro, algo así como las reglas del purgatorio y vuelven a este mundo físico motivados por odio, amor, tristeza, venganza o envidia.

Los Tenjo-Sagari persiguen a sus víctimas incansablemente.

Rashomon no Oni:

Ibaraki el demonio que molestaba en el puente de Rashomon en Tokio.

Ibaraki o el “Demonio de Rashomon”, cuenta la leyenda que asustaba a todos los transeúntes del puente del mismo nombre en Kyoto, hasta que un día, Watanabe no Tsuna (milenario samurai) decidió esperarlo, escondido a que este saliera y vencerlo. Ibaraki se transformó en una hermosa mujer y cuando lo persuadió, éste se transformó en el demonio, pero Watanabe logró por reflejo, cortar su brazo. Ibaraki debió huir gritando de dolor, y Watanabe guardó el brazo en un cofre en su mansión. Al tiempo, Ibaraki se transformó en una tía de Watanabe y logró entrar a la mansión. Ibaraki, transformado en su tía pide ver el brazo y el samurai accedió.

Al ver el brazo, Ibaraki se volvió a transformar y robó su propio brazo de las manos de Watanabe, pero nunca más volvió a molestar.

Ibaraki, el Demonio de Rashomon transformado en la tía de Watanabe a punto de robar su propio brazo que había perdido en una corta batalla.

Legados de terror: 

Denise Jodelet nos explicó en 1986 que la “representación social” tiene un carácter definido en sí misma. Enumeró sus características:

  1. Siempre es la representación de un objeto.
  2. Tiene un carácter de imagen y la propiedad de poder intercambiar lo sensible y la idea, la percepción y el concepto.
  3. Tiene un carácter simbólico y significante.
  4.  Tiene un carácter constructivo.
  5. Tiene un carácter autónomo y creativo.

Jodelet nos permite pensar las leyendas y en este caso, los miedos de un folklore nipón fascinante. A su vez, me impresiona algo, si estas representaciones sociales expresadas en leyendas refleja algo de realidad: ¡pienso que estamos en problemas!

Imágenes: ElYokaiDiario