Karni Mata: Adorando a más que solo ratas
Karni Mata (करणी माता) fue una hindú conocida del siglo XIV por ser la encarnación de la diosa suprema Durga (दुर्गा), quién es la triunfante del bien sobre el mal, la cual portaba diferentes energías de dioses y múltiples brazos para sus logros. Una mujer que protegió gente y que vivió al rededor de 150 años. Así que se le otorgo un templo para su veneración.
¿Dónde se ubica Karni Mata?
Karni Mata es un templo ubicado en la India en la cuidad de Deshnoke con más de 600 años de antigüedad este lugar es un templo dedicado a venerar a las ratas. Si, aunque se vea de locos. Karni Mata alberga al rededor de 20,000 ratas pequeñas color marrón.
Leyendas de Karni Mata
Existen leyendas que explica la razón por la cual se da suma importancia a las ratas. En una de ellas se dice que uno de los hijos de un hombre del clan Charan (Clan reconocido por tener amplios conocimientos culturales, sentido literario, lealtad, la astucia y la disposición inquebrantable) cayó a un estanque ahogándose, sin embargo Karni Mata convoco a Yama, la diosa de la muerte, para revivir al niño y como solo podía ser vuelto a la vida por esta deidad este le propuso la condición de que sus hijos varones de la joven renacerían como ratas a cambio de regresar al chico a la vida.
En la otra cara se comenta que las ratas son los seguidores reencarnados de Karni y por ello deben ser atendidos y venerados. También se mencionó que Karni Mata hizo un acuerdo con Iama, señor de los espíritus de los muertos y guardián del inframundo, en el cual los varones de su clan reencarnarían en ratas, pero esto echo hasta que ellos estuvieran listos para renacer una vez más en aquella tribu.
En el templo se vive toda una pertenencia los habitantes, acostumbrados a la valiosa presencia aquellos animales, caminan y tocan a estos singulares personajes que se muestran indiferentes ante la presencia del hombre ya que son reinas de ese territorio. El lugar es espacioso y amplio; para los ofrendas hay varias vasijas colocadas en diversos lugares del templo.
Ratas y buenos augurios
Bueno ahora la pregunta es . . . “¿estarías dispuesto a este viaje inolvidable?”