La celebraciones de Navidad en sí se deben a una cuestión religiosa, y siendo Asia un país donde conviven múltiples religiones la entrada de esta celebración occidental no tiene muchas repercusiones. Sin embargo, sigue siendo una ocasión para compartir con la familia.

Dos son las tradiciones, si se las puede llamar así, que se desarrollan en Japón en torno al 24 y 25, que por cierto son días laborales para la mayoría.

Pollo del KFC

Lo primero que llama la atención es la que viene de la costumbre norteamericana de comer pavo, pero en Japón conseguir una pavita resultaba difícil, y cocinarla en una parilla, por la falta de espacio, aun más, por eso la importante cadena que se especializa en servir pollo frito vio su oportunidad.

Luego de la efectiva campaña publicitaria en los ’70 donde el Coronel Sanders se vestía de Santa Claus y anunciaba Kurimasu ni wa kantakki! Kentucky para navidad, los japoneses se quedaron con esta costumbre y los locales de comida rápida se convierten en restaurantes donde se llegan a reservar mesas para el día.

La compañía Japan Airlines sirve pollo frito en algunos de sus vuelos.

Preparando un menú de pollo y tarta, las familias y grupos de amigos  suelen ir a estos restaurantes comparten un buen momento. O hacen su pedido para llevar a sus hogares.

Christmas Cake

Otra forma de pasar la noche es en pareja. Al momento de una noche romántica no puede faltar una Christmas Cake acompañada de café o té verde. No tiene nada particularmente especial, suele tratarse de bizcocho relleno de crema y frutas, o a pedido, pero las decoraciones lo son todo.

Las pastelerías trabajan por encargo y aún así las vísperas del 24 se llenan de clientes todos los años, incluso los días posteriores se pueden ver a los empleados rematando las últimas tartas.

Entre las figuras estrellas está Santa Claus, bosques nevados, casa de jengibre, todo en verde, rojo y blanco, con crema o mazapán.